8 de octubre de 2014

Qué malo estar resfriada




Estoy resfriada. Y vale, ya sé que no es grave, pero no me diréis que no es cansado.

Sólo el hecho de no poder respirar por la nariz normalmente, ya jode mucho. Sobre todo en la cama. Siempre se tapa un lado de la nariz, en función del lado sobre el que te acuestes. Y te ves, respirando por la boca, porque con un solo agujero libre no das a basto. La boca seca, claro, de tenerla abierta. Un reguero de baba cayendo sobre tu almohada, también por tener la boca abierta. Y por si todo esto fuera poco, por el agujero tapado, según como, sale agüilla, también directa a la almohada como no espabiles. Porque la agüilla no avisa, viene así, de repente. Hasta que te incorporas, te suenas y te das la vuelta. Y entonces, justo después de la alegría que te da que se destape el agujero que estaba tapado, se te tapa el otro. Y vuelta a empezar.

Todo lo anterior descrito es si tienes suerte. Porque también puede ser que tengas tapados los dos agujeros un buen rato. Eso pasa. Y para eso no tengo palabras, es horrible. Una sensación de impotencia (qué coño, yo tengo palabras para todo), una desazón (qué buena esta palabra también) y una zozobra (anda que esta).

Además, una no deja de ser despistada por el hecho de estar resfriada. Quiero decir, que si el niño era un bebé y yo jamás me acordaba de coger las putas toallitas, pues ahora, por más resfriada que esté, no hay manera de acordarme de los kleenex. Total, que acabo pidiéndole kleenex a todo el mundo. Incluso a desconocidos que, sorprendidos de que no pida tabaco, me dan el pañuelo encantados.

Otro temita que llevo fatal de los resfriados es como acaba la casa. Porque vas acumulando montoncitos de pañuelos usados allá donde estés. En la mesita de al lado del sofá, en la mesita de noche, en el escritorio... Por no hablar del bolso... Cada noche, al llegar, saco unas quinientas bolitas de papel de diferentes colores y texturas (no olvidemos que cada pañuelo es de su padre y de su madre, todos prestados, luego todos  distintos).

En fin, que ya van unos cuantos días. A ver si se va pasando que de verdad que estoy aburrida ya del resfriado este. Al final se me pasará como siempre: justo el día en qué me acuerde de coger los kleenex.

5 comentarios:

  1. Qué gusto me da que otra persona sea tan poco cuidadosa como para dejar papelitos sucios por aquí y por allá :D si yo soy así habitualmente, estando resfriada muchísimo más; al menos tú sacas los papeles usados de la bolsa cada noche, yo los puedo acumular por días y semanas... luego no es tan malo porque en caso de emergencia, reutilizo...

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    1. Jajajaja quien dice "cada noche", dice "cada vez que me acuerdo"...

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  2. Y menos mal que aunque nos dejemos los pañuelos ya llevamos manga larga (es broma) consejo de madre: Respir en la farmacia, te lo pones un ratito antes de acostarte y respiras toda la noche. Abrazos

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  3. Se me ha olvidado dejarte buenos deseos de que se te pase pronto.

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  4. Conozco el respir, pero le tengo manía, no sé por qué...

    Gracias wapa!!

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